Consejos Para Cultivar Guindillas Más Picantes

¿Cómo se te da el cultivo de guindillas? Ya seas principiante cultivando guindillas o tengas experiencia de sobra, todos queremos sacar lo mejor de nuestras plantas. Pero ¿hay algún método para aumentar la capsaicina de estos frutos y conseguir que las guindillas sean lo más picantes posible, o es pura casualidad? Bueno, averígualo con nuestros mejores consejos para cosechar guindillas bastante más picantes de lo habitual.

5 formas de cultivar guindillas más picantes

Por supuesto, puedes dejar que tus plantas Capsicum crezcan por sus propios medios, siempre y cuando les proporciones un mantenimiento y riego regulares, pero ¿por qué no pruebas a maximizar su nivel de picor? A continuación te mostramos cinco consejos clave para hacer que tus guindillas sean más picantes, ¡sin demasiados esfuerzos!

Empieza con la variedad de guindilla más picante (SHU)

Puede que sea el consejo más importante de nuestra lista, y consiste en asegurarnos de seleccionar una variedad picante en sí misma para evolucionar desde ahí. Es completamente inviable cultivar una guindilla Anaheim y esperar que alcance el nivel de picor del pimiento fantasma o del Carolina Reaper. Así que, sienta las bases eligiendo una planta de guindilla con el nivel de picor adecuado para ti y no fallarás.

Y aunque estamos dando consejos sobre cómo cultivar plantas de guindilla más picantes, no significa que tengas que optar por las variedades más picantes del mundo. Si te gusta una variedad más suave pero te apetece subir un poco la temperatura, es totalmente posible.

Pero ¿cómo sabemos qué guindillas son más picantes que otras? Por supuesto, puedes hacerlo probando todas las que te sea posible y midiendo tus preferencias en base al sabor y nivel de picor.

Sin embargo, hay una forma más fácil, y es a través de la escala Scoville. Se trata de un sistema práctico en el que cada guindilla se mide en unidades de picor Scoville, o SHU. Estas unidades están determinadas por la cantidad de gotas de agua necesarias para diluir el picor hasta que no se pueda apreciar. La escala va desde el pimiento morrón (0 SHU), pasando por otros más picantes como el jalapeño (5000 SHU) y llegando al Carolina Reaper (2,2 millones de SHU). Así que, tómate tu tiempo para elegir una variedad con un SHU que contenga el nivel de picor que buscas.

Riega con moderación

Al igual que al cultivar marihuana, a veces hace falta estresar un poquito a nuestras plantas para que respondan como queremos. Un método único para los chiles es regarlos con moderación. Simplemente hay que dejar que el sustrato se seque completamente entre un riego y otro. Muchos cultivadores incluso esperan a que las hojas de la planta empiecen a ponerse mustias y un poco débiles para volver a regarlas.

Al mismo tiempo, este estrés hará que la planta aproveche al máximo la humedad disponible y ponga toda su energía en la producción de frutos. Es cierto que al no proporcionar una rutina de riego adecuada o constante puedes disminuir en cierta medida la producción, pero los pimientos que produzcan estas plantas llegarán a su máxima capacidad de picor.

Hay gente temeraria que "encharca" sus plantas después de una breve sequía para provocarles aún más estrés, pero esto pueden hacerlo solamente personas con mucha experiencia en este campo, capaces de reconocer cuándo una planta ha llegado a su límite.

Mantén alto el nivel de nitrógeno

Y ahora, paciencia y fíate de nosotros. Aunque puede sonar un poco exagerado, controlar los niveles de nitrógeno de la tierra puede afectar al picor de los frutos. Un estudio reciente de la Universidad de California (Rosenberg, 2018) afirma que cuando el nivel de nitrógeno es más alto, se producen frutos más picantes sin afectar de forma negativa al tamaño de la cosecha. Por otro lado, el estudio muestra que los niveles bajos de nitrógeno también pueden producir frutos más picantes, pero el tamaño de la cosecha se ve muy afectado.

Dado que el estudio se realizó en un entorno de laboratorio ¿cómo podemos conseguirlo cultivando en casa? Existen varias formas. Se puede añadir un poco de estiércol al suelo para dar un impulso de nitrógeno, y esto aumentará notablemente el picor de los pimientos. También es posible comprar compost rico en nitrógeno e incluso fertilizante para plantas que mantenga alto el nivel de nitrógeno del sustrato.

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Cosechar en el momento adecuado

El tiempo lo es todo, y cosechar guindillas no es una excepción. Aunque es cierto que se pueden cosechar los frutos de la planta en cuanto salen, es mejor esperar las señales claras de que están listos. No te dejes engañar por la creencia popular de que "las guindillas completamente maduras proporcionan el máximo nivel de picor y sabor". En realidad, una guindilla alcanza su punto máximo de picor cuando deja de crecer en tamaño. A partir de ahí, el nivel de capsaicina primero sufre un fuerte descenso y después sigue bajando de forma más gradual.

Al analizar tres tipos de variedades de guindilla muy utilizadas en México, se demostró que los niveles de capsaicina de los chiles habanero y de árbol alcanzó su punto máximo en los días 45-50 desde la fructificación, y a los 40 días en las variedades de chile piquín. A partir de ese momento, los niveles de capsaicina disminuyeron (Contreras-Padilla & Yahia, 1998).

Por otro lado, se realizó una prueba en chiles serranos en la que no se observó ningún cambio en los niveles de capsaicina durante la maduración de la etapa de cambio de color, de verde a amarillo y rojo (Rocha-Herrera, 1997).

Igualmente, si quieres potenciar el sabor además del picor, deja las guindillas en la planta durante un poco más de tiempo.

Mantén un clima cálido por la noche

No es ningún secreto que las plantas de guindilla prosperan y disfrutan de los ambientes soleados y cálidos. Esto se puede lograr fácilmente durante el día, pero mucha gente se olvida de este factor por la noche. Por tanto, independientemente del tipo de clima en el que vivas, o si cultivas en interior o exterior, tus plantas necesitarán un nivel constante de calor para producir al máximo.

Lograr esto puede ser tan fácil como dejar las plantas expuestas a la luz solar directa durante todo el día y luego proporcionarles calor adicional con una esterilla térmica por las noches. Tus plantas de guindillas seguirán creciendo durante la noche y, de hecho, tendrán el potencial de producir más capsaicina, dando como resultado, ya sabes, pimientos más picantes. Si cultivas en exterior, puedes poner las plantas en un pequeño invernadero.

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Qué debes evitar si quieres guindillas más picantes

Y ahora que ya hemos mostrado los consejos para lograr guindillas súper picantes, es hora de eliminar algunos mitos. Si continúas tu investigación sobre cómo lograr que tus pimientos sean más picantes, es probable que encuentres algunas afirmaciones infundadas y no demostradas. Algunos métodos famosos incluyen echar sal de Epsom a las plantas, polinización cruzada con pimientos dulces y añadir azufre al hoyo de plantación. Todos estos métodos son una forma segura de que tus pimientos pierdan potencia y que pueden tener un impacto negativo en la propia planta.

En casos aislados, es posible que estos consejos hayan ayudado a algunos proyectos de cultivo. Sin embargo, las pruebas son bastante limitadas. Así que, si quieres probarlos, hazlo bajo tu propia responsabilidad. Dicho esto, ¡ya puedes cultivar pimientos más picantes con total tranquilidad gracias a los consejos anteriores!

Adam Parsons

El periodista del cannabis, redactor y autor profesional Adam Parsons forma parte del equipo de Zamnesia desde hace tiempo. Adam escribe sobre una gran variedad de temas, desde el CBD hasta los psicodélicos, crea artículos para blogs y guías, y analiza una amplia gama de productos en constante aumento.

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