La guerra contra las drogas está fallando, y cada vez más políticos se dan cuenta de ello. Por iniciativa de su alcaldesa Monika Hermann, el ayuntamiento de Berlín ha votado para la apertura de su primer coffeeshop legal.

El movimiento no proviene precisamente del deseo de hacer que el cannabis sea más accesible, sino para quitar poder de las manos del crimen organizado. Las autoridades dedican y malgastan muchas horas y grandes cantidades del dinero de los contribuyentes para tratar de combatir la delincuencia asociada con el cannabis y, en su mayor parte, en vano. El delito en sí no proviene del cannabis, sino de la violencia y el crimen organizado que resulta de su prohibición. Dando a la gente la opción de obtenerlo legalmente, se reducirá el poder de las bandas, libera recursos del gobierno y ofrece a los usuarios un acceso seguro.

Es en la zona de Berlín de Friedrichshain-Kreuzberg , donde se llevará a cabo el experimento, en la misma forma que en Amsterdam. Según la ley actual, el cultivo y la venta de marihuana es ilegal, pero se tolera la posesión de pequeñas cantidades. En virtud de la nueva ley, cualquier adulto podrá obtenerlo de manera legal por medio de un coffeeshop.

La votación fue estimulada en gran medida por el infame Görlitzer Park de la región. Es en este parque en donde las autoridades locales deben pasar su tiempo, arrestando a traficantes de drogas. Según la alcaldesa Hermann, la policía ha hecho redadas en el parque en 113 ocasiones y ha detenido a 984 personas desde el comienzo del año.

El Plan

El referéndum, que fue presentado por la alcaldesa Hermann y votado a favor por el consejo, espera utilizar una cláusula especial dentro de las estrictas leyes de prohibición alemanas. Esta cláusula establece que las sustancias clasificadas como estupefacientes (lo que es el cannabis en Alemania), solo podrán ser vendidas cuando sea de interés público. Con la aprobación del voto, el consejo ha presentado una solicitud al Instituto Federal de Medicamentos y Dispositivos Médicos. Si se da el visto bueno, el distrito de Friedrichshain-Kreuzberg será el primero de Alemania en tener un coffeeshop.

Sin embargo, todavía hay obstáculos que se deben abordar. Para empezar, aún no está claro quién dirigirá el coffeeshop y de donde saldrá el cannabis. ¿Será importado de algún lugar como los Países Bajos, como en el caso de la República Checa? Todavía hay un montón de preguntas que deben ser respondidas.

En cualquier caso, el hecho de que un consejo alemán haya votado a favor de crear una fuente legal de marihuana es un enorme paso adelante para la legalización. Es demasiado pronto para decir exactamente qué es lo que va a ocurrir. Tal vez el gobierno se interese y destruya la iniciativa pro marihuana antes de que pueda echar raíces, o tal vez estamos viendo el comienzo de la despenalización en Alemania - sólo el tiempo lo dirá.