¿Son Las Salsas Picantes Un Superalimento?

Salsas picantes: o nos encantan o no podemos soportarlas. Muchas personas no solo adoran el sabor de la comida picante, sino que además disfrutan de esa sensación de ardor que otras son incapaces de tolerar. Independientemente de lo que opines sobre ellas, las salsas picantes ofrecen beneficios potenciales para la salud que deberías conocer.

¿Qué son las salsas picantes?

Por definición, las salsas picantes son condimentos que producen una intensa sensación de picor en la boca ¡y en otras partes del cuerpo! Sin embargo, existen varias especias que activan el sistema nervioso central de una forma que hace que la gente las describa como “picantes”. A diferencia de otras salsas de sabor fuerte a base de especias, que llevan ingredientes como rábano o wasabi, las salsas picantes generan su característico efecto gracias a su ingrediente principal: los pimientos picantes.

Y más concretamente, a su compuesto activo capsaicina, que es el responsable de esa sensación de picor. Esta molécula se une a los receptores TRPV1, que están involucrados en la detección del dolor y la transmisión sensorial.

Las salsas picantes se clasifican en base a su contenido de capsaicina y, por tanto su nivel de picor, por medio de una herramienta llamada escala Scoville. Este sistema mide el grado de picor en unidades Scoville o SHU (Scoville heat units), que indican el número de veces que se pueden diluir los compuestos de la capsaicina de un determinado pimiento, hasta que sean indetectables. Por ejemplo, los jalapeños suelen tener unas 2000-8000 SHU, lo que significa que se necesitará la misma cantidad de diluciones para que su contenido de capsaicina no se pueda detectar al medirlo.

El número de SHU varía notablemente entre las distintas variedades de pimientos picantes. Los chiles menos picantes, como los poblanos, solo tienen unas 1000-1500 SHU, mientras que los más pungentes como el Carolina Reaper, pueden alcanzar hasta 2.300.000 SHU.

¿Cómo se consumen las salsas picantes?

Al ser un condimento tan popular, las salsas picantes se pueden utilizar de muchas formas en la cocina, como por ejemplo:

• En un sofrito: las salsas picantes y los sofritos combinan muy bien. Pocas preparaciones se pueden enriquecer tanto con un toque de capsaicina como un buen sofrito. Las posibilidades son infinitas, y además son compatibles con las dietas veganas y los platos a base de carne.
• Con alitas de pollo: hay una receta a la que el picante le va incluso mejor que a los sofritos: las humildes alitas de pollo. Con su piel crujiente, su carne jugosa y el toque que les da la salsa picante, forman un trío culinario insuperable.
• En ensaladas: estos platos no suenan especialmente interesantes, por lo que, independientemente de si sigues una dieta vegetariana o quieres añadir más fitonutrientes a tu alimentación, un chorrito de salsa picante puede animar la experiencia de comer lechuga.
• En sopas reconfortantes: ¿Te has resfriado? ¿Es invierno? Enciende la estufa y prepara un poco de sopa a fuego lento. ¿Qué le falta? ¡Una buena cucharada de salsa picante para calentarte desde dentro!

¿Qué posibles beneficios ofrecen las salsas picantes?

Añadir salsa picante a prácticamente cualquier alimento puede mejorar notablemente la experiencia gastronómica de varias maneras, desde potenciando su sabor hasta por puro placer masoquista, y apenas aumentan el contenido de calorías del plato. Pero las distintas fórmulas abrasadoras del mercado proporcionan algo más que una nueva experiencia para los sentidos. Los últimos estudios demuestran que las salsas picantes ofrecen varios beneficios para la salud, lo que podría situar a estos condimentos en la categoría de superalimentos.

Salsa picante y control del peso

La capsaicina posee lo que los investigadores llaman “potencial antiobesidad” (Zheng et al., 2017). ¿Qué quiere decir esto? Pues resulta que este compuesto activo de los pimientos picantes tiene potencial para mejorar la salud metabólica y ayudar con la pérdida de peso. Esta sustancia química podría reducir el apetito y, por tanto, la ingesta calórica. Además, la capsaicina activa la grasa parda, un tipo de grasa que tiene capacidades termogénicas y que puede ayudar al cuerpo a quemar calorías mediante la regulación de la temperatura corporal.

Salsa picante y sistema inmunológico

Le debes mucho a tu sistema inmunológico, porque sin él no estarías leyendo este artículo. En este momento, sus numerosos agentes están patrullando tu cuerpo y combatiendo los patógenos perjudiciales. Así que, para devolverle el favor, puedes darle un poco de salsa picante. Los pimientos picantes están repletos de vitamina C, la cual desempeña un papel clave en la función inmunológica. Las salsas picantes son formas concentradas de chiles, por lo que contienen grandes cantidades de este antioxidante. Para asegurarte de que ofrezcan el máximo contenido de vitamina C, tendrán que estar elaboradas con chiles procesados, ya que algunas salsas contienen mucho extracto de capsaicina pero muy pocos pimientos.

Salsa picante e inflamación

Las enfermedades contagiosas que antes eran mortales, ahora son una amenaza mucho menor para la población gracias a la medicina moderna. Sin embargo, en la actualidad existen muchas enfermedades inflamatorias crónicas debido al estilo de vida moderno, como los hábitos sedentarios y la mala alimentación. Los estudios preliminares en animales han demostrado que la capsaicina puede producir un efecto antiinflamatorio comparable al del diclofenaco, un fármaco que se utiliza para reducir la inflamación en casos de artritis y lesiones agudas de músculos y ligamentos (Jolayemi & Ojewole, 2013).

Salsa picante y estado de ánimo

Muchas veces, las personas que disfrutan enormemente de los pimientos más abrasadores son consideradas extrañas. Pero, ¿existe una explicación para su locura? Pues resulta que quienes adoran la sensación infernal que provocan las salsas picantes, en realidad se están beneficiando de una compleja cascada neuroquímica, ya que, en respuesta al dolor que experimentan con la ingesta, su cuerpo libera un montón de endorfinas (las sustancias químicas que provocan placer y que están relacionadas con la mejora del estado de ánimo) (Choy, El Fassi, & Treur, 2021). Los estudios en animales han comprobado que la capsaicina también produce efectos antidepresivos al actuar sobre el receptor TRPV1 (Pasierski & Szulczyk, 2022).

Salsa picante y salud del corazón

La ciencia ha demostrado que la capsaicina podría ayudar a reducir el riesgo de sufrir enfermedades coronarias (la principal causa de muerte en la era moderna). En un estudio aleatorizado, doble ciego y controlado con placebo, se observó que la suplementación con capsaicina aumenta el nivel de colesterol HDL en ayunas y reduce los triglicéridos (Qin et al., 2017). En palabras más sencillas, este compuesto picante redujo los factores de riesgo de esas enfermedades.

¿Hay algún efecto secundario asociado al consumo de salsa picante?

Las investigaciones preliminares indican que las salsas picantes ofrecen una serie de asombrosos beneficios para la salud. Pero ¿tiene algún inconveniente la ingesta de fuego líquido? Como podrás imaginar, las salsas picantes no sientan bien a todo el mundo. Echa un vistazo a los principales riesgos a continuación.

Niveles de sodio potencialmente altos

Algunas salsas picantes tienen un contenido de sal demasiado alto. Si las consumes en grandes cantidades, podrías exceder la dosis diaria de sal recomendada por la Organización Mundial de la Salud, que es de 2000mg. El exceso de sal en la dieta puede provocar muchos problemas de salud, como presión arterial alta y enfermedades cardíacas.

Podrían no ser aptas para estómagos sensibles

La capsaicina puede provocar malestar gastrointestinal en personas sensibles a esta molécula. Al producir irritación en el aparato digestivo, este compuesto puede causar dolor de estómago y diarrea. Para la gente con úlceras de estómago y afecciones similares se recomienda evitar la salsa picante en la cena.

Podrían causar dolor intenso

Algunas personas son mucho más sensibles a la capsaicina que otras. Todos somos distintos desde el punto de vista genético, lo que significa que algunas personas poseen cantidades mucho mayores de receptores TRPV1. Y dado que estos sitios están relacionados con la transmisión del dolor, incluso los chiles más suaves pueden afectar gravemente a estas personas. Si a esto le añadimos un pimiento especialmente picante, es una forma segura de sufrir un dolor lo bastante intenso como para tener que ir a urgencias.

5 salsas picantes por descubrir

Tanto si tienes afición por las salsas picantes como si estás empezando a descubrir este exquisito infierno, tenemos unas sugerencias para tu paladar. Estas fórmulas cuidadosamente elaboradas aportarán unos sabores muy interesantes a tus comidas, junto con ríos de lava. Echa un vistazo a las siguientes cinco salsas picantes y decide si merecen un lugar en la despensa de tu cocina.

Salsa picante (Mad Dog 357)

La salsa picante Mad Dog 357 tiene la friolera de 357.000 SHU. En otras palabras, este líquido abrasador hará estallar tus papilas gustativas e incendiará tu lengua. Prueba un par de gotas en una sopa y sentirás retumbar todo tu sistema nervioso.

Salsa picante Scorpion (Mad Dog 357)

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Finest Truff Stuff (Scovilla)

Las trufas son uno de los manjares más caros del mundo culinario. Los buscadores de trufas usan el agudo sentido del olfato de perros y cerdos para encontrarlas en la naturaleza. Una trufa blanca de 1,3kg llegó a venderse por ¡más de 300.000 dólares! Para crear su salsa Finest Truff Stuff, Scovilla ha combinado el picor de los pimientos Carolina Reaper con la exquisitez de las trufas. No contiene aditivos ni gluten, y es apta para personas veganas.

Finest Truff Stuff (Scovilla)

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PowerDrops con 3 millones de SHU (Scovilla)

Salvo que quieras eliminar todo el placer que te produce la comida y abrasarte la boca, no añadas esta salsa a tus platos. La salsa PowerDrops, con 3.000.000 SHU, es capaz de dejar KO incluso a los fanáticos más veteranos de los chiles.

Salsa picante Pure Gold (Mad Dog 357)

Si aún no puedes enfrentarte a la crudeza de la salsa PowerDrops pero te apetece poner a prueba tu tolerancia a la capsaicina, prueba la salsa picante Pure Gold. Eso sí, con una calificación de 1.000.000 SHU, tampoco te librarás del dolor por completo. Este producto viene con un pequeño detalle muy interesante: la bala dorada que cuelga del cuello de la botella es una cucharita para dosificar la salsa.

Finest Reaper’s Knockout (Scovilla)

Te presentamos la salsa Finest Reaper's Knockout, una creación de Scovilla que combina un buen gusto con una brutal sensación abrasadora. Si eres capaz de soportarla, el contenido de esta botella lleva el sabor y la intensidad de la cocina mexicana a un nivel completamente nuevo. ¡Prepara unos tacos y agárrate el sombrero!

Finest Reaper's Knockout (Scovilla)

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¿Quieres abrasarte?

Ahora ya conoces al culpable del sabor picante de los chiles y algunos datos científicos sobre los posibles beneficios de las salsas picantes. Además, has descubierto cinco de las mejores salsas picantes del mercado. La única pregunta que nos queda por hacer es: ¿cuál vas a probar primero?

Luke Sumpter

Licenciado en Ciencias de la Salud, y un apasionado del cultivo de plantas, Luke Sumpter trabaja desde hace 7 años como periodista y escritor profesional en la transversalización de la marihuana y la ciencia.

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