¿Es Adictivo Tener Sueños Lúcidos?

Los sueños lúcidos son un “estado híbrido entre el sueño y la vigilia”, es decir, un estado de lucidez que se produce al dormir, en que la persona que sueña es consciente de que está soñando. Quienes tienen sueños lúcidos se conocen como onironautas. El nivel de lucidez varía de una persona a otra, pero algunos onironautas son capaces de tomar el control del sueño mientras duermen. Este control les permite aprovechar la lucidez para sus propios y diversos fines.

En este artículo, analizamos el sueño lúcido en relación con la adicción. ¿Es posible que nos volvamos adictos a controlar nuestro estado inconsciente? Sigue leyendo para descubrirlo.

¿Puede la gente volverse adicta a los sueños lúcidos?

Existen opiniones divididas al respecto. Antes de comparar los distintos puntos de vista, conviene aclarar la gran diferencia entre adicción y dependencia.

Adicción y dependencia

A nivel clínico, hay una diferencia entre “adicción” y “dependencia”. Aunque las definiciones de cada uno de estos términos son inconsistentes, hay algunas reglas que pueden ayudar a distinguirlos correctamente.

Normalmente, el término “dependencia” se usa para referirse a la dependencia física de una sustancia; los síntomas de abstinencia y tolerancia a una sustancia son característicos de ello. Una dependencia física no implica necesariamente una adicción.

En cambio, una “adicción” implica un cambio de comportamiento que hace que las personas den prioridad a una sustancia por encima de otras cosas, aunque les pueda perjudicar a ellas mismas o a los demás. Este comportamiento está causado por cambios bioquímicos en el cerebro, derivados del consumo continuado de una sustancia. La adicción siempre implica una dependencia física y mental a una sustancia.

Potencial adictivo de los sueños lúcidos: opiniones diversas

¿Cuáles son las diferentes respuestas a esta pregunta?

Hay quienes argumentan que no es posible tener adicción a los sueños lúcidos, ya que no hay ninguna sustancia de por medio, y los onironautas no experimentan síntomas de abstinencia cuando dejan de soñar lúcidamente.

Otro argumento habitual es que no es posible desarrollar una adicción porque pasamos muy poco tiempo soñando (unos 100 minutos por noche), y menos tiempo aun soñando lúcidamente.

Por otro lado, se considera que el sueño lúcido puede servir como una forma de evasión, y puede ser tan placentero que constantemente quieras más y más. Según algunas personas, el mundo de los sueños puede actuar como una realidad alternativa, del mismo modo que los videojuegos, internet, o el consumo de drogas. Hay quienes incluso comparan directamente el sueño lúcido obsesivo con el abuso de sustancias.

Está claro que la definición médica de “adicción” mencionada arriba no es aplicable a los sueños lúcidos, ya que no hay abuso de sustancias de por medio.

Pero, aunque no lo llamemos adicción, si llegas al punto en que vivir en un estado onírico se convierte en tu principal estrategia para lidiar contigo mismo y con el mundo que te rodea, es una situación preocupante.

¿Qué atrae a la gente a tener sueños lúcidos?

Los sueños lúcidos pueden aportar varias ventajas a la vida de una persona, y a veces incluso se recomiendan con fines terapéuticos. Sus posibles ventajas incluyen:

• Los sueños lúcidos ayudan a las personas a entrar en contacto con su subconsciente, por lo que pueden llegar a comprenderse mejor a sí mismas y a las fuerzas que les impulsan.

• Los sueños lúcidos te permiten enfrentarte a tus demonios internos y a tus miedos más profundos en un entorno seguro, lo que generalmente te resultará beneficioso en la vida.

• Interactuar con nuestra mente subconsciente puede potenciar la creatividad y la capacidad de innovación.

• Los sueños lúcidos son entornos seguros donde la gente puede probar distintas estrategias para resolver los problemas a los que se enfrenta en la vida real.

• Los onironautas pueden practicar diferentes habilidades mientras duermen, lo que puede ayudarles a mejorar en la vida real.

• Los sueños lúcidos pueden ser terapéuticos para quienes han perdido a un ser querido o tienen cuestiones sin resolver relacionadas con la persona fallecida. Les brinda la oportunidad de enfrentarse espiritualmente al pasado y/o a su pérdida.

• Si una persona llega a dominar el mundo de los sueños, a menudo también aumenta la seguridad en sí misma durante el estado de vigilia.

• Los sueños lúcidos son muy entretenidos. Los onironautas pueden hacer prácticamente cualquier cosa mientras sueñan, como volar o hablar con un personaje de su novela favorita.

• Quienes están recuperándose de un trastorno por consumo de drogas podrían aprovechar el entorno libre de riesgos de los sueños lúcidos para abordar los conflictos internos a los que se enfrentan durante la recuperación.

• Los sueños lúcidos pueden ayudar a la gente a descubrir sus aspiraciones de futuro cuando carecen de orientación y seguridad en sí mismas en el estado de vigilia.

• Soñar lúcidamente puede ser una estrategia eficaz para hacer frente a las pesadillas, y puede afectar positivamente a otras variables del sueño.

  

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¿Cuáles son los riesgos de soñar lúcidamente?

Aunque puede ser beneficioso en varias formas, tener sueños lúcidos conlleva ciertos riesgos.

Como ocurre con muchas cosas en la vida, los sueños lúcidos pueden ser beneficiosos siempre y cuando no ocupen una parte excesiva del espacio mental de una persona. Aunque en nuestra vida no pasamos mucho tiempo soñando, y menos aun soñando lúcidamente, podemos obsesionarnos con nuestros sueños y usarlos para evadirnos de la realidad. En estos casos, interrumpir esta práctica y/o hablar con un profesional podría ayudarnos a descubrir qué nos lleva a obsesionarnos con los sueños lúcidos.

Un efecto secundario habitual de los sueños lúcidos es dormir mal, lo que puede provocar fatiga e irritabilidad. Sentirse cansado y tenso no suele ayudar a nadie a llevar una vida más satisfactoria.

Además, algunos onironautas afirman sentirse confusos como consecuencia de los sueños lúcidos. Y también se han relacionado con la disociación y la psicosis subclínica.

Algunas investigaciones sugieren que los sueños lúcidos podrían ser generalmente arriesgados para las personas psicológicamente vulnerables.

En un estudio longitudinal realizado en 2018 con 187 personas que se autoevaluaron, la provocación deliberada de los sueños lúcidos se asoció con unos límites difusos entre los sueños y el estado de vigilia. Se ha señalado que esto puede aumentar los síntomas de “disociación y esquizotipia”.

Dicho esto, hay quienes afirman que, para algunos onironautas experimentados, los sueños lúcidos les ayudan a mejorar su vida real y a conectar mejor con ella.

En el estudio recién mencionado de 2018 también se halló una relación inversa entre las emociones positivas de los sueños lúcidos y “varios síntomas psicopatológicos” (Aviram & Soffer-Dudek, 2018).

Para quienes se están recuperando de un trastorno por consumo de sustancias, tener sueños lúcidos puede ser arriesgado si sienten la tentación de fantasear con consumir esa sustancia mientras sueñan. Tener una recaída en un sueño es peligroso porque puede mermar la voluntad de la persona de mantenerse sobria y, por tanto, provocar una recaída en la vida real.

Para cualquier persona, dejarse llevar por fantasías poco saludables mientras sueña lúcidamente puede ser peligroso, ya que podría trasladarse a la vida real.

Por último, existe cierta preocupación por el hecho de que entrar en contacto con el subconsciente podría ser peligroso si la persona no está preparada para afrontar lo que pueda encontrar. Pero la mayoría de gente afirma haber sentido resultados positivos tras este tipo de confrontación o contacto.

Consejos para manejar tus sueños lúcidos

Como (futuro) onironauta, puedes hacer varias cosas para mejorar tu experiencia al soñar lúcidamente, y hacerla más segura y sostenible.

Céntrate en lograr nuevos objetivos mientras estás despierto/a

Puede ser tentador usar los sueños lúcidos para disfrutar de una sensación de liberación al poder hacer cosas en los sueños que (pensamos que) no podemos lograr en la vida real. Sin embargo, intentar realizar esas cosas en la vida real puede tener un impacto aún más profundo. No olvides que puedes hacer cosas increíbles si te fijas objetivos realistas y te esfuerzas por conseguirlos.

Limita tus sueños lúcidos

Pon límites a tus sueños lúcidos, procurando tenerlos solamente en aquellos momentos en que no afecten a tu agenda, tu vida laboral o tu vida social.

No dependas únicamente del sueño lúcido

Aunque tener sueños lúcidos puede ser terapéutico, el hecho de abrirnos a nuestro propio subconsciente podría sacar a la luz nuestros miedos o asuntos sin resolver. Para afrontarlos, podría ser útil combinar el sueño lúcido con tratamientos convencionales, como la terapia.

Disfruta de fantasías sanas

Como hemos mencionado, usar el sueño lúcido para dejarse llevar por fantasías dañinas puede afectar a la vida real, e incluso aumentar el riesgo de una recaída en quienes están recuperándose de un trastorno por abuso de sustancias. Para evitar estos riesgos, sueña con cosas sanas como tomar el sol o aprender nuevas habilidades.

¿Es peligroso tener sueños lúcidos?

En definitiva, tener sueños lúcidos no es ni positivo ni negativo de por sí. Si tu estado psicológico no es especialmente vulnerable, podrías ver qué tal te funciona. Algunas personas se benefician enormemente de las posibilidades de soñar lúcidamente. Sin embargo, podría ser perjudicial si una persona se obsesiona con ello y/o lo utiliza como forma de evasión constante. Según los investigadores, el hecho de que los sueños lúcidos puedan beneficiar a una persona depende en gran medida de su estabilidad mental, así como de las características de la lucidez.

Zamnesia

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