Cómo Hacer Tu Propio Tabaco Para Shisha: Guía Detallada

Fumar con una shisha es una actividad relajante para disfrutar a solas o en compañía. Y crear tu propio tabaco para shisha te permite usar tus ingredientes favoritos y añadir los sabores que más te gusten. Créenos: una mezcla de tabaco personalizada ofrece una experiencia completamente nueva. Preparar tu propio tabaco desde cero puede ser muy sencillo o bastante complicado.

A continuación, veremos una receta fácil para empezar, que podrás usar como base para crear otras variaciones más complejas.

¿Qué es el tabaco para shisha?

El tabaco para shisha es el material que se pone en la cazoleta. También se conoce por otros nombres que hacen referencia a lo mismo:

• Shisha (mezcla para shisha)
• Tabaco
• Tabaco para narguile
• Melaza

El tabaco suele ser la base de la mayoría de mezclas para shisha. Con frecuencia se usan hojas de tabaco rubio o negro, que se tratan con melaza o miel y glicerina o glicerina vegetal, para humedecerlas. Otros productos para fumar, como los cigarros o los puros, utilizan tabaco seco. El nivel de humedad de la mezcla influye en la forma en que se produce el humo. Mientras que para fumar cigarros y puros hay que quemar el tabaco, con las shishas se calienta por convección, es decir, el calor se aplica de forma indirecta.

Además, el tabaco para shisha está aromatizado, por lo general, a base de distintos extractos; lo que da lugar a las intensas fragancias y sabores por los que son famosas estas mezclas. Los extractos pueden ser tanto naturales como químicos, dependiendo del método de producción y de tus preferencias.

Hay cientos de versiones de tabaco para shisha, así como de opciones sin tabaco. Las bases de estos últimos pueden ser hojas de té, fruta o fibra de caña de azúcar.

¿Existe alguna diferencia entre el tabaco para shisha y para narguile?

No. Los términos "narguile", "shisha" y "cachimba" hacen referencia al dispositivo que se usa para fumar el mismo tipo de tabaco. Shisha también es el material que se fuma con un narguile, cachimba o shisha (por lo que es normal que cause cierta confusión).

¿Cuáles son los beneficios de preparar tu propio tabaco para shisha?

Crear tu propia mezcla de tabaco para shisha ofrece varias ventajas:

• ¡Los ingredientes los eliges tú!

• Puedes mezclar los sabores que quieras.

• Tendrás un control total de su calidad; los amantes de la naturaleza pueden optar por materiales completamente ecológicos.

• Podrás conectar con lo que terminará dentro de tu cuerpo.

• Te permite enseñar algo nuevo a tus amigos.

• Puedes hacer un regalo especial para alguien.

¿Cuál es el mejor tabaco para fumar con una shisha?

Está claro que hacer tu propio tabaco para shisha es una buena idea. Pero, ¿qué tabaco es el mejor para la base?

Como ya hemos dicho, tú eliges. Escoge cualquier tipo de tabaco de hoja suelta. Dado que tendrás que tratarlo después, el nivel de humedad no es importante. Si quieres que produzca mucho humo y no te importa que tenga un sabor más fuerte, compra tabaco de pipa para darle un toque especiado. Con el fin de prepararlo y que esté listo para la siguiente receta, sácalo del paquete y déjalo secar al aire libre (quizás durante toda la noche).

Tabaco para shisha sin nicotina

Si no quieres fumar tabaco, utiliza otras hierbas o extractos secos.

Cómo hacer tu propia mezcla de tabaco para shisha

Y ahora vamos a la parte interesante. Esperamos que nuestra receta y tu creatividad te guíen durante el proceso.

Ingredientes

• Tabaco de hoja suelta
• Melaza o miel (1g por cada 3g de tabaco; aunque puedes cambiar la proporción sin problemas)
• Glicerina vegetal o glicerina especial para shisha (aprox. 30g por cada 300g de tabaco)
• Tu fruta favorita (aquí vamos a usar manzana)
• Saborizante adicional (opcional)

Utensilios

• Cuchillo
• Tabla de cortar
• Cuencos para mezclar
• Colador (opcional)
• Recipiente hermético
• Robot de cocina
• Cazuela
• Cuchara de cocina
• Tenedor (opcional)
• Papel de aluminio
• Bandeja de horno
• Horno

Instrucciones

Antes de empezar, es probable que quieras saber si es mejor usar miel o melaza. El sabor de la melaza es más intenso y rico, lo que significa que puede ser más dominante. En realidad, dependerá de tus preferencias personales. Independientemente de cuál elijas, te aconsejamos optar por un producto puro.

Cuando tengas todo lo necesario, habrá llegado el momento de ponerte a cocinar.

Parte 1: Preparación del tabaco o la mezcla sin nicotina

1. Como ya hemos mencionado, el tabaco deberá estar completamente seco antes de empezar a prepararlo.
2. Desmenuza las hojas de tabaco en uno de los cuencos, eliminando cualquier tallo que puedas encontrar en los trozos/hojas más grandes. Extiende el tabaco desmenuzado sobre la tabla de cortar, y tritúralo de forma consistente con un cuchillo. Este paso es especialmente importante si tienes tabaco de hoja entera. Asegúrate de cortar todos los trozos por igual. Elige el tamaño que prefieras; esto determinará cómo vas a llenar la cazoleta.
3. A continuación, empápalo. Para ello, vuelve a colocar el tabaco en el cuenco y cúbrelo con agua de forma que quede completamente sumergido. Déjalo en remojo durante al menos 30 minutos.
   
   Ten en cuenta que este paso es fundamental para conseguir que el tabaco sea maleable, eliminar algo de nicotina y ablandarlo en general. El sabor del tabaco se volverá más suave si lo remojas durante más tiempo, lo cual es aconsejable porque permite que los demás sabores destaquen más.
   
   En lugar de remojar el tabaco, también puedes hervirlo. Otra alternativa es aclararlo con mucha agua (para lo cual te será muy útil un colador).
4. Mezcla el tabaco (sin el agua) con la miel/melaza en un cuenco. Usa la proporción de 1:3 ya mencionada o modifícala un poco si prefieres.

Mézclalo todo bien.

Parte 2: Añade sabor

Hay muchas formas de añadir sabor al tabaco para shisha. En esta guía vamos a usar manzanas, pero puedes utilizar cualquier fruta o aromatizante.

1. Prepara las manzanas cortándolas en cuartos y quitándoles el centro y el tallo, para que no haya semillas ni trozos duros en la mezcla.
2. Tritura las manzanas con el robot de cocina hasta que tengan una consistencia uniforme, como una papilla gruesa con tropezones.
3. Pon el puré en la cazuela y caliéntalo brevemente para eliminar un poco de agua (la shisha funciona mejor cuando la mezcla no está demasiado húmeda). Asegúrate de vigilar el proceso y remueve la mezcla con frecuencia para que no se queme.
4. Espera a que se enfríe y añade la glicerina. La glicerina vegetariana funciona igual de bien. La glicerina sirve para varias cosas:
   - Absorbe la humedad de los otros ingredientes
   - Ayuda a que la mezcla se una al tabaco sin problemas
   - Proporciona cierta uniformidad a la mezcla que evita que se queme de forma rápida y desigual
   - Añade un sabor dulce que recuerda al azúcar
   - Ayuda a preservar la mezcla de tabaco
   Pero no es necesario utilizarla. Si no tienes glicerina o prefieres no usarla, no hay ningún problema.
5. Ahora es cuando las cosas se ponen emocionantes: mezcla todo bien. Pon todo en un cuenco y usa las manos o un tenedor para combinarlo uniformemente. Si la mezcla está demasiado seca, añade un poco de miel/melaza/glicerina.
6. A continuación, moldea tu tabaco en forma de bola grande y envuélvelo en papel aluminio. Coloca la bola en la bandeja para hornear y cuécela a la temperatura más baja posible durante aproximadamente una hora (o 45 minutos a 80°C). Deja que se enfríe dentro del papel de aluminio.
7. Por último, añade cualquier saborizante adicional que prefieras, como, por ejemplo, extracto de vainilla o incluso más glicerina. También puedes añadir más miel o melaza para darle humedad si te parece que está demasiado seco.

Cómo almacenar el tabaco para shisha

Antes de usarla por primera vez, deja que tu mezcla de tabaco repose en la nevera durante toda la noche. Cuando se haya enfriado y hayas añadido los aromatizantes, ponla en un recipiente hermético y vuelve a meterla en el frigo. Esto mejorará mucho la calidad de tus fumadas. Si al día siguiente te sigue pareciendo que está demasiado seca, simplemente añade un poco de miel o melaza.

Si no usas toda la mezcla de una sola vez, continúa almacenándola en la nevera. Es probable que notes que su sabor cambia un poco de un día para otro, posiblemente a mejor.

La fecha de caducidad de tu tabaco para shisha dependerá en gran medida de los ingredientes que utilices. Estas son algunas señales de que tu mezcla de tabaco está en mal estado:

• Se ha secado. Si está seca, humedécela como te mostramos arriba. Si no está húmeda, tampoco estará fresca.
• Huele raro
• Presenta un color extraño
• Tiene una textura áspera

Si tu mezcla para shisha presenta alguno de estos síntomas, es mejor que no la fumes. En el mejor de los casos, no te resultará agradable; y en el peor, podría ser peligrosa para tu salud.

Almacenarlo en un recipiente hermético en la nevera prolongará la vida útil de tu producto.

Crea tu propia mezcla de tabaco para shisha

Elaborar tu propio tabaco para cachimba es muy gratificante. Con un poco de suerte, nuestros consejos e instrucciones te guiarán sin problemas a través de todo el proceso. Utiliza tu creatividad para hacer variaciones más sencillas o más complejas. Y para terminar, ¡disfruta de tus fumadas!

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