¿Qué Son Las Semillas De Cannabis F1, F2 Y F3?

Criar nuevas variedades de marihuana es un asunto totalmente diferente al del cultivo. El proceso de cría requiere años de trabajo minucioso y una gran cantidad de conocimientos especializados, por lo que es una tarea fascinante, aunque no desalentadora. A continuación, analizaremos algunos términos básicos relacionados con la cría y estabilización de nuevas variedades de cannabis. Cuando hayas terminado de leer este artículo, tendrás una buena idea de la diferencia entre las semillas F1, F2 y F3, y otros conceptos importantes.

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Milky Way F1 Automatic (Royal Queen Seeds) feminizada

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Padres: Blue Mammoth x Blue Dream x Sin Tra Bajo Auto

Periodo De Floración: 10-11 semanas de la semilla al cultivo

THC: Muy Alto

CBD: Bajo

Tipo de floración: Autofloreciente

Conceptos básicos de genética

Al hablar sobre cannabis, a menudo se mencionan términos relacionados con la genética, ¿pero qué significan realmente? Si solo quieres comprar y cultivar semillas de marihuana, no hace falta que entiendas mucho sobre genética de cannabis, más allá de las características básicas de la variedad que hayas elegido.

Pero, si quieres adentrarte en el mundo de la cría de cannabis, hay algunas cosas que debes entender para hacerlo bien. Por supuesto, puedes simplemente polinizar unas plantas hembra y ver qué pasa; pero, sin un poco de conocimiento, no tendrás forma de asegurar buenos resultados.

¿Qué son las variedades F1, F2 y F3?

Al buscar información sobre las variedades de marihuana, puede que hayas visto una frase similar a la siguiente: “Esta variedad es descendiente de una F1...”. Suena bien, ¿pero qué significa? En el mundo de la cría de marihuana, las diferentes generaciones se denominan F1, F2, F3, y así sucesivamente, donde cada número consecutivo se refiere a una generación posterior, que se aleja más de la variedad ascendiente pura y estable.

La “F” representa “filius”, que significa “hijo” en latín. Aunque, en realidad, lo que busca la gente son las hijas que producen THC. Con cada generación, los rasgos o fenotipos elegidos se vuelven más estables, hasta que finalmente cada semilla obtenida presentará un fenotipo predecible y fiable.

Cómo crear nuevas variedades de marihuana

Crear una nueva variedad de cannabis puede ser tan simple como cruzar dos variedades y ver qué pasa. Pero, si solamente haces eso, lo más probable es que solo consigas una única generación de una “variedad” determinada. Para crear una variedad estable, que persista a lo largo de las generaciones, es necesario cruzar y retrocruzar cuidadosamente las plantas con los rasgos deseados hasta que se estabilicen. A continuación, te explicamos los aspectos básicos que debes saber sobre este proceso.

F1

La primera generación de plantas que surgen de un cruce se denomina F1. Estas plantas muestran la mitad de los genes de cada madre y, como resultado, se parecerán mucho a lo que buscaba el criador. Digamos que una variedad ascendiente tiene una genética dominante AA, y la otra tiene una genética recesiva aa. El F1 resultante tendrá genética Aa y mostrará características que son una combinación de las dos madres.

Por lo general, un F1 se parece mucho a lo que se quiere conseguir con un cruce, pero no es el producto final. Aunque todas las plantas F1 pueden parecer iguales, hay una gran diversidad bajo la superficie, lista para mostrarse en su descendencia.

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Cosmos F1 CBD Automatic (Royal Queen Seeds) feminizada

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Padres: Oregon CBD

Periodo De Floración: 11-12 semanas de la semilla al cultivo

THC: 0-1%

CBD: Alto

Tipo de floración: Autofloreciente

F2

La siguiente fase consiste en cruzar dos plantas F1. Al hacerlo, verás que no todos sus descendientes muestran un perfil genético “Aa”. En esta generación de plantas, el gen dominante “A” empezará a resurgir, mostrándose en más de la mitad de la descendencia.

Por ejemplo, si tuvieras cuatro plantas, dos serían “AA”, una “Aa” y otra “aa”. Así que en la generación F2, solo el 25% de las plantas muestran realmente el fenotipo deseado. Los alelos (genes) dominantes reciben el nombre de dominantes porque tienen muchas más probabilidades de aparecer en la descendencia en comparación con los genes recesivos. Si se dejaran crecer libremente, las plantas F2 se cruzarían entre sí y, con el tiempo, volverían más o menos al progenitor dominante con el que se empezó la cría, perdiendo todos los genes recesivos por el camino.

¿Y qué podemos hacer al respecto?

F3

Esta tercera generación es donde empieza la estabilización (pero no donde acaba). En esta fase, no deben usarse las plantas con genética “AA”, ya que solo aportan genes dominantes, anulando los recesivos; en lugar de ello, hay que cruzar una planta “Aa” con una “aa”. De este modo, un 50% de su descendencia será “Aa” y el otro 50% será “aa”, lo que se aproxima mucho más a lo que buscamos. Si cruzaras dos plantas “Aa”, estarías repitiendo el proceso de cruzar dos F1 entre sí, lo que resultaría en una descendencia mayoritariamente “AA”; y por este motivo es necesario incluir una planta con todos los genes recesivos.

En realidad, no puedes “ver” exactamente qué genes tienen las plantas, pero puedes ver qué características presentan y hacer deducciones a partir de ahí. Por ejemplo, si quieres plantas bajitas a la vez que productivas, solo deberías cruzar las plantas que muestren estas características y descartar el resto.

Pero esta tercera generación no es el final del camino hacia la estabilización. Si realmente quieres crear una variedad estable, puedes seguir haciendo cruces durante más generaciones (por ejemplo, produciendo plantas F4 y F5).

Variedades de línea consanguínea (IBL)

Las variedades de línea consanguínea o endogámica (también llamadas variedades IBL por sus siglas en inglés, “inbred line”) son el punto en que una variedad puede considerarse estable; el punto al que quieres llegar tras criar las generaciones F1, F2, F3, etc. Si cruzas dos plantas de una IBL, cada una de las plantas descendientes mostrará el mismo fenotipo. Si no es así, ¡sigue cruzando!

Crear una variedad IBL puede tardar años, dependiendo del número de generaciones que requiera el proceso. Así que, si quieres tomarte en serio la cría de marihuana, prepárate para un largo viaje; no crearás la mejor variedad del mundo con un solo cruce.

Las IBL son el objetivo final de los criadores comerciales. Estas semillas producen plantas muy similares y fiables, por lo que pueden venderse con un alto grado de certeza sobre lo que van a producir. Si una variedad no ha alcanzado esta fase, no se pueden hacer afirmaciones exactas sobre las plantas que producirán estas semillas.

Semillas de marihuana polihíbridas

Los polihíbridos se obtienen cruzando dos variedades F1. Pero recordemos que las F1 tienen mucha diversidad genética, por lo que cruzar dos F1 dará mucho juego. Es difícil predecir lo que creará este proceso, pero los resultados podrían ser extraordinarios. Dicho esto, estabilizar los polihíbridos puede llevar aún más tiempo.

En comparación con la creación de variedades F1, la creación de polihíbridos es una jugada mucho más arriesgada. Dicho esto, muchos criadores optarán por este camino con un objetivo en mente; sin embargo, las probabilidades de obtener resultados inesperados son mucho mayores.

Semillas de cannabis S1

Las semillas de cannabis S1 se producen cuando una variedad se cruza consigo misma, lo que se conoce como autofecundación o autopolinización (“selfing” en inglés, de ahí S1). Este proceso no consiste simplemente en cruzar una planta con otra de la misma variedad, sino en cruzar una planta consigo misma.

Para ello, hay que someter a estrés a las plantas hembra para que se conviertan en hermafroditas, mostrando órganos sexuales masculinos y femeninos. De este modo, pueden polinizarse a sí mismas y producir semillas.

¿Qué es un retrocruce genético?

Los retrocruces se usan para introducir un rasgo deseado, o eliminar un rasgo no deseado, de una variedad.

Supongamos que te gusta una planta porque produce mucho THC, pero es poco resistente a las plagas. En ese caso, podrías cruzarla con otra planta con buena resistencia a las plagas. Si todo va bien, la F1 resultante tendrá una mayor resistencia a las plagas, pero una menor producción de THC. Para remediar esto, puedes retrocruzar esta F1 con un esqueje de la variedad parental rica en THC, y así la descendencia tendrá una alta producción de THC y una mayor resistencia a las plagas. Aunque, en realidad, para maximizar y estabilizar ambos rasgos hacen falta varias generaciones.

Los retrocruces son una práctica muy importante en la cría de nuevas variedades, y permiten a los criadores introducir y eliminar rasgos concretos con una precisión impresionante.

Cría de marihuana: un mundo complejo

Este artículo solo ha tratado brevemente la cría de marihuana, pero considéralo como una introducción a un mundo complejo pero gratificante. El ámbito de la genética es profundo y fascinante; si te tomas en serio la cría, necesitarás mucho ensayo y error para lograr buenos resultados. Sin embargo, todo criador debe empezar por algún punto, así que esperamos haberte inspirado para dar tus primeros pasos en el mundo de la cría cannábica.

Max Sargent

Max escribe desde hace más de una década, y en los últimos años se dedica al periodismo del cannabis y psicodélico. Tiene experiencia en numerosos aspectos del sector, y colabora con empresas como Zamnesia, Royal Queen Seeds, Cannaconnection, Gorilla Seeds, MushMagic, etc.

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