
Marihuana y búlder
Escalar bajo los efectos puede sonar arriesgado, y a veces puede serlo. Pero si se hace con cuidado, la marihuana puede aumentar la concentración, fomentar la creatividad y ayudar a relajarte. Tanto si fumas en la terraza del rocódromo como al aire libre, a continuación te explicamos cómo hacerlo de forma relajada, segura y muy satisfactoria.
Aunque la marihuana y la escalada parecen una mezcla extraña, esta combinación ha empezado a hacerse un hueco en los rocódromos y zonas de escalada al aire libre por todo el mundo. Si pasas tiempo en el mundo de la escalada, puede que veas a escaladores combinando la beta y los porros a partes iguales. Para algunas personas, fumar un poco de hierba hace que un día de escalada se convierta en una experiencia más relajada y conectada.
El búlder es especialmente adecuado para esta combinación. Este tipo de escalada se caracteriza por ascensiones cortas e intensas, y mucho tiempo de descanso entre cada intento. Esos momentos de pausa te dan la oportunidad de respirar, reírte con tus amigos y, a veces, dar unas caladas rápidas antes de volver a trepar por la pared. No obstante, escalar bajo los efectos del cannabis conlleva ciertos riesgos, por lo que merece la pena conocerlos antes de probarlo.
Breve introducción al mundo de la escalada
El búlder (también llamado bouldering, boulder o escalada en bloque) es una de las formas más sencillas de iniciarse en la escalada, ya que no requiere cuerdas, arneses ni material sofisticado. Además, puedes hacerlo a solas o con amigos. Los escaladores se enfrentan a ascensiones cortas, normalmente de entre 3-5 metros de altura, y utilizan colchonetas (crash pads) para amortiguar las posibles caídas. Comparado con la escalada deportiva y la tradicional, en las que se requieren cuerdas y material de protección para mantenerse a salvo, el búlder es más ligero y accesible.
Una parte fundamental del bouldering es el ritmo natural de intentarlo, fallar y descansar. Los escaladores suelen intentar subir por una roca o pared varias veces seguidas (¡o a veces cientos!), haciendo largas pausas entre cada intento. Estos descansos son un momento de relax con los amigos, por lo que ofrecen la oportunidad perfecta para fumar tranquilamente, si te gusta fumar. Dado que el búlder incluye esos momentos de inactividad, la marihuana se ha introducido en esta disciplina con mayor facilidad que en otras modalidades de escalada.
¿Cuáles son los pros y contras de combinar marihuana y búlder?
Fumar marihuana al hacer bouldering tiene sus ventajas y desventajas. Conocer ambos aspectos te ayudará a tomar una decisión más acertada.
Pros
Muchos escaladores afirman que consumir marihuana al mientras hacen búlder ofrece una serie de ventajas que pueden mejorar la experiencia.
Mayor concentración
Para algunas personas, la marihuana puede eliminar las distracciones, ayudando a los escaladores a centrarse en el siguiente movimiento en lugar de preocuparse por el estrés del día a día. Fumar hierba en la cantidad adecuada puede crear una mayor sensación de fluidez y de estar presente.
Más relajación
El miedo forma parte de la escalada, especialmente cuando te enfrentas a una ascensión difícil o que no conoces. Un poco de marihuana puede aliviar los nervios y ayudarte a confiar más en tus manos y pies. Ser capaz de relajarte sin descuidar tus movimientos requiere cierto equilibrio; pero, cuando funciona, puede hacer que la escalada resulte más fluida y natural.
Obviamente, el cannabis puede hacer que algunas personas sientan más ansiedad, en cuyo caso el miedo podría multiplicarse. Tal vez tengas que probarlo para ver cómo te afecta.
Conexión con la naturaleza y/o los amigos
Hacer bouldering al aire libre ofrece muchas recompensas a nivel sensorial: sentir la rugosidad de la roca, la brisa entre los árboles o el calor del sol sobre la piel. La marihuana puede intensificar estas experiencias. También puede reforzar las conexiones sociales, ayudando a los escaladores a compartir consejos, ánimos y buen rollo.
Mayor creatividad al escalar
A veces, resolver cómo subir una pared al hacer búlder requiere pensar con creatividad. La marihuana podría ayudarte a ver un problema de forma diferente y a descubrir nuevas secuencias. Dado que cada persona escala de forma diferente en función de su propia fuerza y flexibilidad, un poco de creatividad adicional puede ser una gran ventaja.
Contras
A pesar de las posibles ventajas, la marihuana también puede hacer que el búlder resulte más difícil y peligroso si no tienes cuidado.
Menor propiocepción
La propiocepción es la capacidad que tiene nuestro cerebro de saber la posición de todas las partes de nuestro cuerpo y sus movimientos. La escalada exige controlar bien el cuerpo y colocar los pies con precisión. Fumar marihuana puede reducir esta capacidad, haciendo que sea más fácil equivocarse al buscar los puntos de apoyo o calcular mal las distancias entre los agarres.
Mayor riesgo de caídas
Al reaccionar de forma más lenta y tener menos equilibrio, hay más probabilidades de caerse. Incluso con colchonetas gruesas bien posicionadas, caer desde unos pocos metros de altura puede provocar lesiones. Hacer una ascensión alta o complicada cuando estás fumado supone un mayor riesgo.
Podrías no recordar la beta
La beta (la secuencia de movimientos o cualquier otra información necesaria para escalar por un muro o pared) suele ser la clave del éxito. La marihuana puede ofuscar tu memoria, haciendo más difícil que recuerdes la secuencia prevista una vez que estás en plena ascensión. Olvidar la beta a mitad de la escalada puede hacer que dudes, cometas errores y te caigas.
Menos energía
Algunas variedades de marihuana pueden reducir tu nivel de energía. Una fumada potente y soporífera puede hacer que te resulte más difícil tener la fuerza y la explosividad que a menudo requiere el búlder. Una sesión de bouldering podría acabar antes de tiempo si sientes demasiado cansancio para seguir intentándolo.
¿Dónde fumar al hacer búlder?
Si estás pensando en fumar marihuana mientras haces búlder, es importante tener en cuenta dónde lo haces, tanto por respeto a los demás como para no meterte en problemas.
Búlder en interior
En los rocódromos o gimnasios de escalada suele estar prohibido fumar. Algunos tienen terrazas al aire libre o zonas donde podría estar permitido fumar, pero infórmate bien sobre las normas antes de hacerlo. Incluso si se puede fumar en el exterior del recinto, es de buena educación fumar lejos de las entradas principales o las zonas donde otros intentan calentar o descansar.
Y ten en cuenta que, aunque esté permitido fumar en ese lugar, tal vez no se permita fumar marihuana.
Al aire libre
Al aire libre, es más una cuestión de seguridad y respeto por los demás, que de normativas oficiales. Antes de fumar, es respetuoso alejarse de las rutas o ascensiones más frecuentadas. De este modo, el aire no se llena de humo para los demás escaladores y evitas llamar la atención. Y ten en cuenta el riesgo de incendios forestales, especialmente en lugares muy secos, ya que tirar una colilla encendida podría tener graves consecuencias en la zona.
¿Cuándo fumar al hacer búlder?
Al combinar marihuana y bouldering, es importante elegir el momento adecuado, ya que en caso contrario una buena sesión de búlder podría acabar antes de tiempo y resultar frustrante.
Antes de escalar
Fumar un poco de hierba antes de empezar a escalar puede ayudarte a calmar los nervios y mentalizarte mejor para el ascenso. Sin embargo, si fumas demasiado antes de comenzar, corres el riesgo de sentirte perezoso, torpe o distraído, lo cual no es una buena receta para el éxito.
Después de escalar
Mucha gente prefiere fumar una vez finalizada la sesión de búlder. Terminar un día de escalada con un porro puede resultar gratificante y ayudar al cuerpo a relajarse. Ya sea para aliviar los músculos doloridos o simplemente para relajarte con los amigos tras un día en la roca o en la pared, fumar después de escalar es la forma más segura de combinar la marihuana con el búlder.
Marihuana y bouldering: Después del subidón, cuidado con la bajada
El cannabis y el búlder pueden combinarse, siempre y cuando se haga con cuidado. Una pequeña cantidad de hierba puede aumentar la concentración, la relajación y la creatividad, mientras que un exceso puede ralentizarte y ponerte en mayor riesgo.
Si estás pensando en combinarlos, empieza con ascensiones fáciles en compañía de buenos amigos y observa cómo te sientes. Los colocones mientras escalas no son tan divertidos si te caes constantemente en la colchoneta. Así que ten cuidado y piensa en la seguridad ante todo.
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