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Cómo secar la marihuana
Secar la hierba es una parte esencial del proceso de post-cosecha. El secado ofrece una gran variedad de ventajas, que incluyen mejorar el sabor, aroma y potencia del cannabis, así como prolongar su tiempo de conservación. A continuación encontrarás una guía completa para que aprendas cómo secar tu marihuana como un profesional.
Has regado, fertilizado y cuidado tus plantas de marihuana durante muchas semanas, y ahora, una vez cosechadas, llega una las fases más cruciales del cultivo: el secado y el curado. Lamentablemente, muchos cultivadores (especialmente los novatos) fallan en este último paso, echando a perder todo su duro trabajo al no secar correctamente los cogollos.
Pero no te preocupes, estamos aquí para guiarte en el proceso de secado para que consigas unos cogollos de calidad. Esta guía se centra únicamente en cómo secar la marihuana. Si buscas información sobre cómo manicurar, curar o almacenar tu hierba, consulta nuestras guías dedicadas a estos temas.
¿Por qué hay que secar la marihuana?
¿Te estás preguntando por qué hay que secar el cannabis? Desafortunadamente, no se pueden cosechar los cogollos de una planta y fumarlos directamente. Los cogollos recién cosechados contienen humedad que hay que eliminar para poder consumirlos. Secar la marihuana ayuda a evaporar la humedad que contiene, lo que hace que produzca un humo más suave y permite que destaquen sus deliciosos terpenos. Y lo que es más importante, el secado permite almacenar el cannabis y ayuda a evitar que el moho eche a perder tus reservas de hierba.
Además de estas ventajas, el secado también da comienzo a cambios químicos como la descarboxilación, que es esencial para activar cannabinoides como el THC y el CBD, liberando su potencial cuando llega el momento de fumar o vapear.
¿Cuál es la diferencia entre secar y curar?
Algunos cultivadores creen que los términos “secado” y “curado” son intercambiables, pero no es así.
Como su nombre indica, el secado elimina la humedad de los cogollos. En cambio, el curado se produce después del secado y consiste en guardar los cogollos secos en un recipiente hermético durante al menos dos semanas.
El curado mejora considerablemente el sabor, la suavidad y la potencia del cannabis al permitir que los cambios químicos (como la descarboxilación) sigan realizándose lentamente. Además, también aumenta el tiempo de conservación de la marihuana y evita la degradación de los valiosos cannabinoides.
En la siguiente tabla encontrarás las ventajas de un buen secado y curado:
| Sabor y aroma | Calidad de la fumada | Riesgo de moho | Potencia | |
|---|---|---|---|---|
| Secado y curado adecuados | Aromático e intenso | Alta | Bajo | Alta |
| Improper drying & curing: | Sabor más áspero, aromas pobres | Bajo | Alta | Bajo |
Para más información sobre cómo curar tus cogollos tras el secado, consulta nuestra guía de curado.
Condiciones ideales para secar la marihuana
Secar tu hierba en las condiciones adecuadas es fundamental para preservar su calidad, potencia y sabor. Más abajo, veremos varios métodos de secado. Pero, independientemente del método que elijas, las condiciones del lugar donde seques tus cogollos influirán considerablemente en la calidad del producto final.
Por ejemplo, si tu zona de secado es demasiado húmeda o está mal ventilada, tus cogollos podrían cubrirse de moho. En cambio, si es demasiado seca o calurosa, corres el riesgo de que se degraden los valiosos cannabinoides y terpenos, lo que daría lugar a una hierba menos potente y con sabor áspero.
Muchos cultivadores, sobre todo los que cultivan en interior, utilizan armarios de cultivo para el secado. Estos armarios son excelentes para este fin, ya que ofrecen un espacio limpio, cerrado y discreto, donde puedes controlar la temperatura, la ventilación y la humedad, que son factores fundamentales para un buen secado.
En la siguiente tabla se muestran las condiciones ideales para secar el cannabis:
| Factor | Rango ideal | Por qué es importante |
|---|---|---|
| Temperatura | 15–21°C | Demasiado calor = pérdida de cannabinoides. Demasiado frío = secado lento y más riesgo de moho. |
| Humedad relativa | 50–60% RH | HR superior al 65% = moho. HR inferior al 45% = secado demasiado rápido, humo áspero. |
| Ventilación | Suave, indirecta, constante | No apuntes los ventiladores directamente hacia los cogollos. |
| Exposición a la luz | Ninguna | La luz UV degrada el THC y los terpenos. Seca el cannabis siempre a oscuras. |
| Tiempo de secado | Normalmente 7-14 días | Los cogollos están listos cuando los pequeños tallos pequeños se parten limpiamente, sin doblarse. |
| Espacio entre cogollos | Deja un espacio de 2-5cm entre los cogollos | Esto evita que se toquen, para un secado uniforme y evitar el moho. |
Si mantienes estas condiciones, tus cogollos se secarán lentamente y de manera uniforme, conservando su potencia y suavidad y evitando que se estropeen.
Herramientas para mantener una zona de secado ideal
Para crear el entorno perfecto para secar tu cosecha, unas pocas herramientas básicas pueden marcar la diferencia:
- Termohigrómetro: Esta herramienta es esencial para controlar con precisión la temperatura y la humedad relativa de la zona de secado.
- Humidificador/deshumidificador: Perfecto para ajustar y mantener el nivel óptimo de humedad relativa.
- Aire acondicionado: Un aparato de aire acondicionado puede estabilizar y regular la temperatura de la zona de secado, especialmente en climas cálidos.
- Ventilador oscilante: Un ventilador proporciona una corriente de aire suave e indirecta para favorecer un secado uniforme, temperaturas estables y evitar el moho.
Diferentes métodos para secar la marihuana
Hay varias formas de secar marihuana en casa, y el método más adecuado para ti suele depender del espacio que tengas disponible, tu presupuesto y tus preferencias. Tanto si solo tienes una pequeña cosecha, como si tienes que secar muchos cogollos, a continuación encontrarás una solución que se adapte a tus necesidades.
Independientemente del método que elijas, recuerda que los cogollos no deben tocarse entre sí durante el secado. Esto evita la formación de moho y favorece la circulación del aire, con lo que se obtiene un secado uniforme. Además, tendrás que decidir si vas a manicurar los cogollos antes de secarlos (manicurado en verde) o después de secarlos (manicurado en seco). Consulta nuestra guía de manicurado para más información.
Método de la caja de cartón
Este es un método rentable y discreto para secar marihuana, muy adecuado para quienes tienen pocas plantas o para quienes no disponen de mucho espacio.
Instrucciones:
- Coge una caja de cartón grande. En su interior pon cuerda, malla o alambre de modo que puedas colgar cogollos o ramas pequeñas.
- Haz varios agujeros en los laterales de la caja para permitir la circulación pasiva del aire.
- Pon la caja en una habitación oscura y ventilada, lejos de la luz directa o de fuentes de calor.
- Hay gente que prefiere secar la marihuana en una caja de madera, aunque al menos los primeros días habría que dejarla abierta. En cualquier caso, nosotros solo recomendamos usar cajas de madera para el proceso de curado.
Consejos prácticos:
- Deja una separación de al menos 2-3cm entre los cogollos para evitar la acumulación de humedad y garantizar un secado uniforme.
- Abre la caja una vez al día para inspeccionar si hay moho y para renovar el aire.
- Aunque el cartón absorbe la humedad de forma natural, también puede atrapar olores y provocar un secado desigual si no se vigila atentamente, así que inspecciona la caja con regularidad.
Colgar y secar
Colgar el cannabis para secarlo es el método más tradicional y el más usado por los cultivadores caseros, que valoran su sencillez y eficacia.
Instrucciones:
- Cuelga las ramas o los cogollos boca abajo usando cuerdas, perchas o un tendedero en una habitación oscura con temperatura controlada.
Consejos prácticos:
- Al colgar las ramas o cogollos, deja una separación de 5-10cm para que circule el aire.
- Pon un pequeño ventilador en la habitación para ayudar a mantener unos niveles estables de temperatura y humedad. Pero no apuntes el ventilador directamente hacia los cogollos.
- Inspecciona los cogollos a diario para ver si presentan señales de moho, un secado excesivo o tallos quebradizos. Los cogollos estarán secos y listos para el curado cuando sus tallos se partan haciendo un chasquido, en lugar de doblarse.
Cómo usar una rejilla de secado
Las rejillas de secado están especialmente diseñadas para secar marihuana. Son compactas y expandibles, perfectas para quienes tienen una cosecha mediana o grande, especialmente para quienes cultivan en interior y tienen poco espacio para colgar la hierba para secarla.
Instrucciones:
Pon la rejilla de secado en una habitación oscura con temperatura controlada o dentro de un armario de cultivo. Esparce uniformemente los cogollos manicurados sobre los estantes o bandejas de la rejilla de secado.
Consejos prácticos:
- Deja una separación de al menos 2cm entre cada cogollo para permitir la circulación del aire y evitar la acumulación de humedad.
- No apiles los cogollos unos encima de otros.
- Voltea los cogollos con cuidado 1-2 veces al día para garantizar un secado uniforme por todos los lados.
Este método aprovecha eficazmente el espacio vertical y permite secar un gran número de cogollos a la vez.
Mallas de secado de hierbas
Las mallas de secado de hierbas son muy adecuadas para secar marihuana y ofrecen una solución práctica para los cultivadores que necesitan un sistema de secado organizado y que ocupe poco espacio. Para conseguir buenos resultados, recomendamos usar nuestra malla de secado de hierbas.
Instrucciones:
- Distribuye los cogollos sobre cada estante de la malla, sin apilarlos. Asegúrate de que no queden unos encima de otros, ya que esto impediría una buena ventilación y aumentaría el riesgo de moho.
- Cuelga la malla de un gancho del techo en una habitación seca, oscura y ventilada, o dentro de un armario de cultivo.
- Mantén la malla alejada de las paredes para que pueda girar 360° y maximizar la ventilación alrededor de tus cogollos.
Este método no solo es ordenado y muy eficaz, sino que hace que voltear e inspeccionar los cogollos sea más rápido y fácil.
¿Cuánto tarda en secarse la marihuana correctamente?
En las condiciones ideales descritas arriba, el cannabis suele secarse en 7-14 días. Pero esto puede variar dependiendo de los siguientes factores:
- Tamaño del cogollo: Los cogollos más grandes y densos retienen más humedad y tardan más en secarse que los cogollos pequeños.
- Nivel de humedad: Un mayor nivel de humedad ralentiza el secado, mientras que un nivel más bajo de humedad lo acelera (pero puede hacer que la marihuana se seque demasiado).
- Temperatura: Las temperaturas más frescas ralentizan el secado, mientras que las más cálidas pueden secar los cogollos demasiado rápido.
- Ventilación: Una buena ventilación favorece un secado uniforme y ayuda a evitar el moho.
- Método de manicurado: Los cogollos manicurados en verde suelen secarse más rápido que los cogollos manicurados en seco, ya que tienen menos hojas.
¡Y recuerda que es importante tener paciencia! Intentar acelerar el secado puede afectar gravemente el sabor, aroma y potencia de tu hierba.
¿Cómo puedes saber si tus cogollos están secos y listos para curar?
Muchos cultivadores usan un método sencillo y fiable, llamado la prueba del chasquido, para saber si su hierba está seca y lista para el curado.
Para hacer esta prueba, dobla suavemente uno de los tallos conectados a los cogollos. Si se parte limpiamente haciendo un chasquido, la marihuana ya está lo suficientemente seca y lista para curar. Pero si el tallo todavía tiene elasticidad y se dobla, aún contiene demasiada humedad, lo que significa que los cogollos necesitan más tiempo de secado.
Cuando hagas la prueba del chasquido, realízala en varios cogollos de tu cosecha para asegurarte de que se han secado uniformemente. A veces, los cogollos más pequeños se secan antes que los grandes, por lo que tendrás que curarlos primero mientras dejas que los grandes sigan secándose.
Errores frecuentes al secar los cogollos
Estos son algunos de los errores más frecuentes a evitar al secar tu cosecha para conseguir unos cogollos suaves y de gran calidad:
- Secar con luz directa: Exponer los cogollos a la luz ultravioleta degrada los cannabinoides y terpenos, reduciendo su potencia y aroma. La marihuana debe secarse en un lugar completamente oscuro.
- Demasiado calor: Las altas temperaturas pueden secar los cogollos demasiado rápido, provocando sabores ásperos y la pérdida de los delicados terpenos. Seca los cogollos a 18-22°C para obtener los mejores resultados.
- Mala ventilación: Sin una buena ventilación, la humedad persiste y puede provocar la aparición de moho. Usa ventiladores en la zona de secado, pero sin que el aire sople directamente sobre los cogollos.
- Amontonar los cogollos: Cuando los cogollos están amontonados o se tocan entre sí, retienen la humedad, creando el entorno perfecto para el moho. Deja un poco de espacio entre las flores, independientemente del método de secado que utilices.
Ten en cuenta estos errores al secar tu hierba para conservar su sabor, potencia y calidad.
¿Ya has secado tu cosecha? ¡Empieza a curarla hoy mismo!
Secar la marihuana correctamente es un paso crucial que sienta las bases para un producto final suave, sabroso y potente. Si sigues el método adecuado y mantienes unas condiciones óptimas en la zona de secado, protegerás tu cosecha del moho y evitarás que pierda potencia o produzca un humo áspero.
Pero recuerda que el secado es solo la mitad del proceso. Para disfrutar de todo el potencial de tu hierba, el siguiente paso es el **curado, que no solo mejora su suavidad, sabor y potencia, sino que también mejora el almacenamiento a largo plazo.
Para curar el cannabis necesitas material específico, como frascos e higrómetros. En nuestra guía de curado encontrarás instrucciones detalladas, así como una lista de todas las herramientas que necesitarás para terminar el proceso de cosecha adecuadamente.
